¿No os pasa que vuestros hijos siempre quieren ver la misma película o escuchar la misma historia?
Nada importa las veces que la hayan visto o leído, el nivel de atención es el mismo o incluso mayor que la primera vez.
Aunque a nosotros , como adultos nos parezca cansado y aburrido, es una practica positiva para ellos, ya que el cerebro infantil aprende e interioriza conceptos y experiencias en base a la repetición.
Los niños pequeños normalmente prefieren las cosas y experiencias que les resultan familiares a la novedad.
La repetición les hace sentir que el mundo es un lugar seguro y predecible para ellos.
Al menos sienten por un pequeño espacio de tiempo que pueden dominar la situación, se sienten seguros y tranquilos cuando les contamos el mismo cuento una y otra vez. A todos nos gusta sentirnos seguros, saber que va a ocurrir.
Aquí no va a estar presente el miedo a lo desconocido, por lo que les permite estar relajados y controlar la situación. No van a haber sustos o imprevistos que ellos no puedan controlar.
Conocer la historia ayuda a los niños y las niñas a integrar mejor la historia, como un patrón, como cadenas de significado que cada vez las pueden ir entendiendo mejor, las pueden ir descifrando mejor.
Así van aprendiendo nuevas palabras, habilidades lingüísticas y narrativas, así van entendiendo mejor los argumentos y así se van fijando en nuevos detalles que antes se les habían pasado por alto, a veces también por la rapidez de las imágenes se sienten abrumados de tanta información que no pueden procesar.
Van superando retos personales que les producen satisfacción, por lo que no es de extrañar que los niños nos pidan que les contemos siempre el mismo cuento o que les cantemos o pongamos siempre las misma canción.
No te has dado cuenta de que algunos niños se ríen de antemano antes de ver la imagen en una película, saben lo que va a pasar.
Esta predicción involuntaria hace que se vaya desarrollando el pensamiento lógico y así la memoria.
Los niños no suelen entender bien una película la primera vez que la ven, suceden muchas cosas a la vez, imágenes muy rápidas, diferentes personajes, diferentes diálogos, diferentes emociones… Los niños no pueden procesar tanta información de una sola vez, no la comprenden bien a la primera, por eso el niño pide verla otra vez y otra vez.. por que cada vez que la ve captará nuevos detalles, la irá entendiendo mejor y le gustará mas… es como si tú te la dejas a medio.. querrás acabarla de ver.. pues algo así es lo que les puede ocurrir a ellos.
Cada vez que la ven o escuchan disfrutan más de ella y establecen una conexión emocional mas fuerte.
Esto es una forma de maduración, es necesario para poder crecer y evolucionar . Es una fase que debemos respetar, aunque nos agote, después seguro que echaremos de menos estas cosas y muchas otras, cuando necesiten vivir muchas experiencias nuevas.
¿Qué podemos hacer nosotros para ayudarles en este proceso si os veis inmersos en esta situación?:
Podemos hacer juegos de completar oraciones, ofrecerle otros libros relacionados con el tema, relacionar la historia con sucesos reales, en el caso de una película un día podéis centraros mas en el texto, otro día en las imágenes…
Ya sabéis, conocer la historia les ayuda a organizar sus pensamientos, a organizarse en el tiempo y un juego que les gusta mucho es inventarse lo que va a suceder o dejarles que se adelanten a lo que va a ocurrir, darles voz y dejarles a ellos ir narrando. Las ventajas son infinitas.
Necesitan estas experiencias, por lo que no os extrañéis cuando os lo pidan incansablemente.