El binomio es un cubo que pertenece al área de sensorial, concretamente al apartado de “materiales que no aíslan una sola cualidad”, esto quiere decir que se trabaja más de una cualidad a la vez, en este caso se trabaja el sentido visual, la forma y el color. Se suele presentar a niños con edad comprendida entre los 3 años y medio y los 4 años y medio aproximadamente, siempre teniendo en cuenta que ya tienen conocimientos previos de formas y colores.
El material consiste en una caja de madera con tapa que contiene 8 cubos y prismas rectangulares de madera de diferentes colores.
El binomio es una representación concreta de la fórmula algebraica:
(a+b)= a+3ab+3ab+b
Los factores de la ecuación están representados por los cubos y los prismas. La tapa muestra el patrón de dimensión plana.
La 1ª presentación que podemos hacerle al niño con este material es la siguiente. Construir el binomio dentro de la caja por niveles.
La guía y el niño llevan a la mesa el binomio y se sientan. Lo destapa y coloca la tapa frente al niño para que le sirva de referencia.
Saca el primer piso del binomio y lo coloca a un lado.
Saca el 2º piso del binomio y lo coloca al lado sin mezclarlo con el primer piso.
La guía monta el 1er nivel, dentro de la caja Cuando termina le dice: “Ahora voy a montar el 2º”. Monta el 2º le pide que lo haga él.
La guía lo desmonta y coloca el primer piso (nivel) a un lado y el 2º piso al lado. No se mezclan los cubos de los niveles, esto se hará después para aumentar la dificultad. El niño lo monta.
Cuando termina se monta dentro de la caja para guardarlo.
La 2ª presentación: Construir el binomio fuera de la caja.
Cuando el niño ya sabe montar el binomio dentro de la caja se le muestra otra forma de trabajar. La guía saca todas la piezas del binomio, mezclando los dos niveles, tapa la caja y la pone a un lado. Monta el 1er nivel y el 2º nivel fuera de la caja. Le pide al niño que lo haga.
Si fuera necesario, el niño puede construir los dos niveles mezclados dentro de la caja, como paso intermedio.
3ª presentación: Construir el binomio fuera de la caja con los niveles separados.
Consiste en construir el 1er nivel fuera de la caja y a la derecha (no encima) construir el 2º nivel. Así, cuando están los dos montados le muestra al niño que uno es más alto que el otro. Mezcla todos los prismas en un lado e invita al niño a hacerlo.El binomio es un cubo que pertenece al área de sensorial, concretamente al apartado de “materiales que no aíslan una sola cualidad”, esto quiere decir que se trabaja más de una cualidad a la vez, en este caso se trabaja el sentido visual, la forma y el color.
4ª presentación. El desfile. Construir por colores fuera de la caja.
Consiste en colocar los cubos con base azul, con el cubo azul al frente, formando una columna al lado derecho de la mesa, de manera que sea vea el color de todas las piezas. Hace otra fila igual con los cubos rojos, con el rojo al frente.
Comienza a montar el binomio colocando los prismas rojos y después los azules.
Desmonta los cubos mezclándolos en el lado derecho e invita al niño a hacerlo.
Estas son las presentaciones que se le hacen al niño pero luego existen las “variaciones” , que son las exploraciones espontáneas que hace el niño con el material y que sirven para que éste se mantenga más tiempo en sus manos, ayudando a que la mente sea más clara hasta que las abstracciones se establezcan. Son invenciones del niño, la guía no las presenta. No deben reprimirse.
En Montessori no es necesario corregir al niño porque el material en sí mismo ya es autocorrectivo, a esto le llamamos “control de error”, es decir, el niño se da cuenta con el mismo material cuando está haciéndolo bien o cuando se ha equivocado y él mismo lo corrige. En el binomio, el control de error se encuentra en la discriminación del color, forma y tamaño. Si el niño no monta bien el cubo no cerrará la caja y verá claramente que no está montado. Es importante dar los pasos que el niño necesite para que tenga éxito pero que a la vez sea un reto para que atraiga el material. Hay que conseguir ese punto intermedio de dificultad.
Este material además de mostrar cómo es un cubo y cómo se puede construir, prepara al niño para el álgebra y la raíz cúbica.
Me gustaría terminar con un texto de María Montessori acerca de la autocorrección del niño.
“El deseo del niño por alcanzar un fin que él conoce, lo lleva a auto corregirse. No es una maestra la que le hace notar su error y le enseña cómo corregirlo, sino el trabajo complejo de la inteligencia del niño que lo guía a dichos resultados” . Dra Montessori own Handbook, pág. 71
Por Meritxell Blasco Pardos
Guía Montessori para niños de 3 a 6 años. Formación AMI y psicología